Paula Martín Clares no es una autora cualquiera. Es farmacéutica, especialista en dermocosmética y divulgadora, pero, sobre todo, es una mujer que convirtió el dolor personal en conocimiento transformador. Su libro La salud de tu piel está en lo que comes no nace solo de la ciencia, sino de la experiencia. Con sensibilidad y rigor, desgrana cómo la alimentación impacta directamente en la salud cutánea, y lo hace a partir de su propia historia: una infancia marcada por las alergias, la dermatitis atópica y la pérdida de su madre, el gran motor de su vocación.
Desde muy pequeña, Paula vivió entre hospitales y tratamientos. Su madre, que no venía del mundo sanitario, se convirtió en su principal cuidadora y en la figura que encendió en ella la chispa de la curiosidad por la nutrición. “Siempre decía: ‘Somos lo que comemos’. Era su lema y ahora es el mío”, confiesa la autora.
Ese vínculo tan estrecho se convirtió en un compromiso personal el día que su madre falleció. “Me prometí que estudiaría Nutrición para cumplir su sueño”, escribe en uno de los pasajes más emotivos del libro. Ese juramento marcó un antes y un después: tras terminar la carrera de Farmacia, comenzó a trabajar en una botica de barrio mientras se formaba en Nutrición. Fue entonces cuando comprendió algo crucial: para cuidar a los demás, primero tenía que aprender a cuidarse a sí misma.
Una piel sin brillo y un cuerpo sin energía: así empezó el cambio
Durante años, Paula llevó una alimentación desordenada, rica en productos ultraprocesados, azúcares, sal y lácteos. “Tenía brotes continuos de dermatitis atópica, mis uñas estaban frágiles y mi piel no tenía luminosidad”, recuerda. Su caso no era único: cada día en la farmacia veía cómo muchas personas sufrían problemas similares sin entender su origen.
Este punto de inflexión personal la impulsó a especializarse en dermofarmacia y a investigar el vínculo entre alimentación, microbiota, inflamación crónica y piel. Su misión quedó clara: ofrecer respuestas profundas y sostenibles, más allá de los tratamientos tópicos.

Los enemigos invisibles que alteran la piel desde el plato
En el libro, Paula enumera con claridad los 10 alimentos que más perjudican la salud de la piel, una lista construida desde la experiencia profesional, con argumentos respaldados por la evidencia científica actual sobre nutrición, inflamación y salud cutánea. Con un lenguaje claro y divulgativo, explica cómo determinados ingredientes de uso común pueden provocar desequilibrios internos que se reflejan directamente en el aspecto cutáneo.
Entre los principales enemigos de una piel sana señala el alcohol, los embutidos, las harinas refinadas, las salsas industriales, el azúcar, el marisco, los lácteos, los fritos, la sal en exceso y los productos ultraprocesados. Estos alimentos tienen algo en común: alteran procesos biológicos clave como la producción de colágeno, el equilibrio de la microbiota intestinal o la regulación inflamatoria del organismo.
- El alcohol, por ejemplo, deshidrata intensamente y afecta la función hepática, dificultando la eliminación de toxinas que terminan manifestándose en forma de brotes o piel apagada.
- Las grasas trans y los azúcares añadidos, presentes en bollería, snacks y comidas rápidas, favorecen la glicación, un proceso que degrada las fibras de colágeno y acelera la aparición de arrugas. Paula insiste en que el consumo habitual de harinas refinadas (como pan blanco o pasta no integral) provoca picos de glucosa en sangre, que a su vez intensifican ese proceso y hacen que la piel pierda firmeza mucho antes de lo esperado.
- Los lácteos y embutidos pueden alterar el equilibrio hormonal, disparando reacciones inflamatorias como acné, rosácea o dermatitis.
- Y alimentos con alto contenido en yodo, como ciertos mariscos, pueden generar brotes en personas propensas a afecciones cutáneas. Paula lo vincula especialmente a pieles grasas o con tendencia acneica, explicando que el yodo en exceso estimula las glándulas sebáceas, favoreciendo la aparición de granitos e inflamación.

Todos estos factores favorecen la deshidratación celular, la inflamación sistémica y la oxidación de las estructuras dérmicas, generando un entorno interno poco favorable para la regeneración cutánea.
Uno de los datos más reveladores del libro es su advertencia sobre productos aparentemente inofensivos, como el kétchup o la mayonesa. “Comer kétchup altera el equilibrio natural de la piel”, asegura, por su alto contenido en azúcares. Y advierte también sobre la mayonesa comercial: elaborada con aceites ricos en omega-6 como el de girasol o maíz, puede favorecer la inflamación si no se equilibra con suficientes omega-3 en la dieta. Ese desequilibrio entre ácidos grasos esenciales es, según la autora, uno de los factores que más contribuyen al aumento de sensibilidad cutánea, brotes de acné o piel reactiva.
Porque sí, lo que aplicamos sobre el rostro importa, pero también —y quizás más— lo que comemos a diario y cómo lo digerimos. Como recuerda la autora: “Tu piel es el espejo de lo que pasa por tu intestino”.

Más allá de las cremas: cómo la nutrición se convierte en tu mejor cosmético
“Hay que dejar de tratar solo el síntoma y empezar a tratar la causa”, insiste Paula. Su enfoque no busca prohibiciones, sino conciencia. Promueve una dieta rica en alimentos reales: antioxidantes, grasas saludables, proteínas limpias y vegetales de calidad. Una rutina cosmética eficaz comienza en la cocina.
Hoy asesora a pacientes que buscan algo más que un sérum milagroso. Personas que, como ella, han entendido que la piel también se escucha, se nutre y se equilibra desde el interior. Su historia es el reflejo de un nuevo paradigma en salud y belleza: menos filtros, más conocimiento.
Si te interesa cuidar tu piel desde dentro, este libro es solo el principio. Cada vez más expertos coinciden en que la belleza comienza en el plato. No te pierdas estos 5 libros imprescindibles sobre alimentación y belleza que debes leer este año si quieres potenciar tu bienestar desde dentro. Desde el suplemento esencial para cada mes para mantener tu piel radiante y elástica todo el año, hasta los cinco alimentos que una dermatóloga recomienda incluir en nuestra dieta para combatir la piel seca, existen muchas estrategias respaldadas por la ciencia. Porque sí, comer para rejuvenecer es posible: descubre los 10 alimentos que añadir a tus comidas para conseguir una piel y melena joven y empieza hoy tu cambio desde dentro.