Pocas materias primas despiertan tanta fascinación como la vainilla. En perfumería, su presencia es sinónimo de calidez, confort y deseo. Desde las civilizaciones mesoamericanas, que la consideraban un tesoro espiritual, hasta las casas de esencias contemporáneas, esta vaina aromática ha recorrido siglos y continentes. Sin embargo, su olor natural dista mucho del cliché que asociamos con lo dulce o lo empalagoso. La vainilla auténtica es compleja, a veces incluso ahumada, con matices balsámicos que envuelven la piel sin saturarla. Cuando se integra con maestría, su profundidad puede ser tan envolvente como la de un cuero bien trabajado o un tabaco curado al sol. En este contexto aparece Vanille Havane "Cuir des Abysses" de Les Indémodables, un perfume que redefine la idea de la sensualidad oscura a través de una edición casi secreta.
La historia de esta nota es tan rica como su aroma. Extraída de las vainas de la orquídea Vanilla planifolia, su esencia fue durante siglos un lujo reservado a la realeza. Pero la naturaleza caprichosa de la planta (que florece un solo día al año) la convierte en una de las materias más escasas del mundo. En el siglo XIX, la química moderna dio origen a la vainillina, una molécula sintética que replicaba parcialmente su olor. Ahí nació la confusión. La vainilla natural contiene cientos de componentes aromáticos; la vainillina, solo uno. Por eso no huelen igual. La primera es terrosa, cremosa, con un corazón que recuerda al ron y a la madera. La segunda, en cambio, resulta más plana y azucarada. En perfumería fina, la diferencia es abismal. Y Vanille Havane "Cuir des Abysses" lo demuestra con una interpretación que huye de lo fácil y abraza la verdad olfativa.
De hecho, los perfumes de vainilla están en todas partes ahora mismo. Su popularidad ha crecido tanto que cuesta encontrar una fragancia que no la utilice. Pero aquí no hay rastros de caramelo ni de algodón de azúcar. Lo que ofrece Les Indémodables es otra dimensión: una vainilla con garra, densa, envuelta en un velo amaderado y con un halo de humo que recuerda a un club de habanos a medianoche. La dulzura está contenida, equilibrada por un acorde de cuero y tabaco que transforma lo familiar en algo misterioso. Cuando se habla de perfume con carácter, profundidad y alma nocturna, Vanille Havane "Cuir des Abysses" se lleva la palma.
El perfume de vainilla que habla de la autenticidad del cuero ruso
Vanille Havane "Cuir des Abysses” de Les Indémodables, una esencia creada por Antoine Lie
El corazón de esta fragancia late con el pulso de una historia insólita. Todo comenzó con un hallazgo casual: un artículo en una revista de moda que mencionaba la legendaria técnica del "cuero ruso", famosa por su aroma inconfundible. El fundador del laboratorio interno de Les Indémodables quedó tan intrigado que decidió rastrear su origen. Meses de investigación lo llevaron hasta una pequeña curtiduría artesanal, la única que había logrado revivir aquel método ancestral de curtido con corteza de abedul. Obtener una muestra de ese cuero fue toda una hazaña. Pero el verdadero reto vino después: capturar su olor, destilarlo, concentrarlo. El resultado fue un extracto único que nunca se había utilizado antes en perfumería.

Antoine Lie, el maestro perfumista detrás de Cuir des Abysses, convirtió ese hallazgo en un desafío creativo. En lugar de suavizarlo, decidió enfrentarlo a la voluptuosidad de la vainilla habanera. El contraste es hipnótico: la calidez del bálsamo se enfrenta a la sequedad del cuero, el dulzor se disuelve entre sombras de resina y humo. Solo existen 500 frascos de esta edición limitada, cada uno numerado, con una concentración del 8 % de extracto natural de cuero ruso y un proceso de maduración de dos semanas. Su precio, 420 euros por 50 ml, refleja tanto su rareza como la dificultad de su elaboración. En realidad, casi ningún perfume de vainilla huele tan lujoso como este.
El primer instante sobre la piel es embriagador: una nota de vainilla oscura, casi licorosa, se abre paso entre acordes de tabaco y bálsamo. A medida que evoluciona, emergen las sombras del cuero, con un fondo que recuerda a la madera húmeda, la ceniza y la miel. Hay algo animal y al mismo tiempo exquisito, como si la vainilla hubiera sido ahumada en un barril de ron y sellada con cera de abedul. Esa tensión entre lo cálido y lo seco lo convierte en un perfume de presencia inconfundible, pensado para la noche o para esos días en que la piel necesita una armadura imposible de roer.
Otros perfumes en los que reina la vainilla con más carácter
Vanilla Powder Extrait de Matière Première

Entre las casas que han reinventado esta nota con elegancia destaca Matière Première, la firma del perfumista Aurélien Guichard. En Vanilla Powder, la vainilla se muestra más etérea, envuelta en un juego de contrastes entre lo frío y lo cálido. Su salida de café recién molido introduce una energía adictiva, seguida por un corazón de incienso y vainilla de Madagascar que aporta un brillo sutil, más espiritual que goloso. El fondo, con benjuí y ládano, deja una estela envolvente que se adhiere a la piel sin imponerse. Su precio es de 240 euros por 50 ml en Isolée.