Un día trabajas como dependienta en un supermercado y al día siguiente ganas un concurso de belleza de Orange County y ruedas Scarface junto a Al Pacino. Esto, simplificando mucho, es lo que le sucedió a Michelle Pfeiffer, la actriz que se metió a Hollywood en el bolsillo, de la noche a la mañana, en las décadas de los 80 y los 90, y que desapareció por voluntad propia con el nacimiento del nuevo siglo, aunque la verdad es que, si repasamos su filmografía, lo cierto es que no ha dejado de trabajar en ningún momento. Solo se retiró temporalmente de protagonizar las super producciones más jugosas.
Este exilio autoimpuesto tiene su explicación y, aunque en numerosas ocasiones ha afirmado odiar las entrevistas, ha expuesto sus razones en Interview: "Soy una persona más equilibrada, honestamente, cuando estoy trabajando. Pero tuve mucho cuidado con el lugar donde filmaba, cuánto tiempo estaba fuera, si funcionaba o no con el horario de los niños. Y me volví tan exigente que era 'incontratable'. Y entonces… No lo sé, simplemente, pasó el tiempo… Desaparecí, sí".
Sin embargo, antes de esto consiguió tres nominaciones al Oscar en un lapso de cuatro años - por sus interpretaciones en Las amistades peligrosas, Los fabulosos Baker Boys y Por encima de todo - y una hazaña muy poco común para los intérpretes que dan vida a superhéroes y villanos: Michelle Pfeiffer recibió muy buenas críticas por parte de la prensa especializada por su interpretación de Catwoman en Batman Vuelve.
Las últimas dos veces que la hemos visto en una película ha sido en Maléfica: Maestra del mal dando vida a la Reina Ingrith y en Vengadores: Endgame como Janet Van Dyne aka Wasp, la Avispa, una superheroína de Marvel Cómics. No lo puede evitar: está claro que a Michelle Pfeiffer le va la marcha de las súper producciones y en la actualidad se encuentra rodando las nuevas aventuras de este personaje en Quantumania junto a Evangeline Lilly y Paul Rudd.
Antes de que este nuevo estreno de superhéroes llegue a los cines, la veremos en un papel mucho más glamuroso, el de la extravagante Frances Price en French Exit, película basada en la novela homónima de Patrick DeWitt en la que interpreta a una socialicé de Manhattan que decide gastarse lo que le queda de herencia en París. Por este papel, precisamente, ha sido nominada como Mejor Actriz protagonista de comedia en la ultima edición de los Globos de Oro .
Y vienen más proyectos. Michelle Pfeiffer también se meterá en la piel de Betty Ford, esposa del presidente de Estados Unidos Gerald Ford que, además de ejercer como Primera Dama desde 1974 hasta 1977, fue modelo, activista y empresaria. Esta ficción no se estrenará en el cine, sino en la pequeña pantalla bajo el título The First Lady, donde compartirá cartel con Viola Davis y Gillian Anderson interpretando a Michelle Obama y Eleanor Roosevelt respectivamente.
Mientras contamos las horas para verla en todos estos nuevos registros, aprovechamos para recopilar las películas y personajes más icónicos de la trayectoria de Michelle Pfeiffer en el día de su 63 cumpleaños.
Scarface. El precio del poder (1983)
Michelle Pfeiffer interpreta a Elvira, la amante del cruel y violento gánster Tony Montana (Al Pacino). Al principio, ella es una mujer altiva que le invita a bailar en un club y se ríe de su origen cubano. Sin embargo, al final acaba cayendo en sus redes y en una espiral de autodestrucción.

Casada con todos (1988)
En esta comedia de Jonathan Demme, Michelle Pfeiffer es Angela de Marco, la esposa de Frank de Marco, mafioso, y una mujer estresada por su hijo y sus malas decisiones. Cuando su marido es asesinado en un ataque de la mafia, decide romper con este mundo. Sin embargo, mientras intenta liberarse del asedio de uno de los jefes del hampa, se enamora del agente del FBI que les investiga.

Las amistades peligrosas (1988)
En esta adaptación de la novela de Choderlos de Laclos, Michelle Pfeiffer interpreta a Madame de Tourvel, mujer sensible e inocente a la que el depredador vizconde de Valmont (John Malkovich) se propone seducir para ganar una apuesta a la despiadada Marquesa de Merteuil, interpretada por Glenn Close.

Los fabulosos Baker Boys (1989)
Michelle Pfeiffer demostró sus dotes de la canción en esta película de Steve Kloves en la que interpreta a Susie Diamond, una escort de lujo que pretende redimirse en el mundo del espectáculo y para ello se une al dúo de Jack y Frank, rompiendo su pacífica y estable relación profesional.

La casa Rusia (1990)
En este drama de espías basado en una novela de John le Carré, Michelle Pfeiffer interpreta a Katya, una joven editora soviética que envía a Barley (Sean Connery), un editor británico, una serie de documentos militares confidenciales. Tanto la Unión Soviética como el Gobierno de Reino Unido comienzan a sospechar de la relación y las intenciones de ambos. La actriz recibió su tercera nominación a los Globos de Oro por su interpretación en esta película.

Frankie y Johnny (1991)
Garry Marshall, director de Pretty Woman, adapta la obra de Terrence McNally en esta película en la que Al Pacino interpreta a un cocinero de comida rápida que se enamora de Frankie (Michelle Pfeiffer), una camarera que trabaja en el local. Ambos volvieron a demostrar que su química se mantenía en forma casi una década después del estreno de Scarface.

Batman vuelve (1992)
Su uniforme de villana diseñado por Bob Ringwood y Mary Vogt le proporcionó un estatus icónico en cuanto a villanos de cómic en el cine se refiere. Su Catwoman está considerada como una de las mejores interpretaciones en una película de superhéroes, y Batman vuelve, de Tim Burton, proporciona a este personaje una gran historia de fondo y una escena de transformación digna de ver en bucle.

Por encima de todo (1992)
Laurene Hallett es un ama de casa de Dallas en los años 60 que es infeliz en su matrimonio. Laurene adora a Jackie Kennedy y, cuando se entera de que la pareja presidencial va a realizar su fatídica visita a Dallas, se asegura de poder verlos en persona. Sin embargo, lejos de ser uno de los días más felices de su vida, acaba viéndose atrapada por el magnicidio.

La edad de la inocencia (1993)
La novela de Edith Wharton sobre las costumbres de la alta sociedad neoyorquina de finales del siglo XIX presenta a la Condesa Ellen Olenska (Michelle Pfeiffer), una mujer que acaba de regresar a Nueva York desesperada, después de escapar de un matrimonio infernal. Esta polémica decisión la condena al ostracismo porque su círculo se niega a aceptarla de nuevo. Sin embargo, el abogado Newland Archer (Daniel Day-Lewis), prometido de la prima de Ellen, se niega a dejarla de lado porque se ha enamorado de ella.

Mentes peligrosas (1995)
Michelle Pfeiffer interpreta a Louanne Johnson, una veterana de Infantería de Marina reconvertida en profesora de instituto que intenta conectar con los alumnos más desfavorecidos, con el objetivo de motivarles para que continúen estudiando.
