Mucho hablamos de la autoestima, ¿pero tenemos claro su significado? De acuerdo con los expertos del Centro Manuel Escudero, "el concepto de la autoestima se puede definir como el resultado emocional que surge si aceptamos y nos gusta nuestro autoconcepto". A su vez, el autoconcepto es "la autopercepción que forma un concepto mental de quien y como somos, todos tenemos una imagen mental de nosotros mismos, es decir, una percepción y una idea de cómo somos tanto física como psicológicamente".
Los expertos añaden que "contrariamente al pensamiento popular, la autoestima no surge de evaluarnos positivamente en cada situación, sino de observarnos con objetividad y sobre todo de estimar y aceptar nuestro autoconcepto".

Poseer una autoestima sana es clave para nuestro desarrollo. Los profesionales de la salud mental explican que "podemos afirmar que la autoestima es la base, los cimientos de nuestra salud psicológica. Si nuestra autoestima es adecuada, podremos interactuar con el mundo de forma sana, podremos afirmarnos en cualquier situación y defender nuestros derechos sin alteración. Con una autoestima sana seremos inmunes o poco vulnerables a los ataques emocionales del entorno y actuaremos con tranquilidad en cualquier situación, aceptándonos incondicionalmente, lo que hará que estemos satisfechos de nuestras reacciones y conductas".
Poseer una autoestima alta no tiene relación con pensar que somos los más guapos del mundo o los más listos de nuestra oficina. De hecho, está muy lejos de estos pensamientos absolutistas. En este caso, la IA nos ayuda a conocer cuáles son los rasgos de las personas con autoestima alta para saber si pertenecemos (o no) a esta familia.
Confianza en sí mismos
Creer en nosotras es esencial para arriesgarnos y avanzar. "Las personas con alta autoestima confían en sus habilidades y capacidades. Esta confianza les permite enfrentar desafíos con determinación y superar obstáculos sin dudar excesivamente en sus habilidades", relata la IA.

Autoaceptación
Nuestras abuelas ya nos lo decían: lo más importante es querernos a nosotras mismas y aceptar aquellas cosas que, quizá, no nos gustan tanto. De acuerdo con la IA, las personas con alta autoestima "tienen una visión positiva de sí mismos y aceptan tanto sus fortalezas como sus debilidades. Esto les permite mantener una actitud compasiva hacia sí mismos y evitar la autocrítica destructiva".
Resiliencia
La RAE señala que la resiliencia es la "capacidad de adaptación de un ser vivo frente a un agente perturbador o un estado o situación adversos" y la IA puntualiza que es uno de los rasgos más valorados. "Las personas con alta autoestima tienden a recuperarse rápidamente de los contratiempos y situaciones adversas. Ven los fracasos como oportunidades de aprendizaje y crecimiento en lugar de dejar que los obstáculos los desanimen", relata la máquina.

Límites saludables
Saber decir que "no" nos quita de muchos quebraderos de cabeza y nos conecta con nuestros límites. Las personas con una autoestima sana "tienen la capacidad de establecer límites claros y saludables en sus relaciones personales y profesionales. Esto les ayuda a mantener relaciones equilibradas y evitar ser manipulados o maltratados por los demás".
Capacidad para el autocuidado
Pensar en los demás está genial, pero también tenemos que dedicar tiempo y recursos a cuidarnos a nosotras mismas. Las personas con una autoestima saludable "priorizan su bienestar físico, emocional y mental. Se dedican tiempo para descansar, relajarse y realizar actividades que los nutren y los hacen sentir bien consigo mismos. Este autocuidado les ayuda a mantener un equilibrio emocional y a enfrentar el estrés de manera más efectiva". Cuidarse a una misma es fundamental para ser feliz.