No podemos asegurar que la reina Letizia tenga el síndrome del nido vacío, ya que hace sólo dos semanas su hija Leonor ingresó en la Academia Militar de Zaragoza y Sofía ha partido hoy para el internado de Gales donde permanecerá dos años. Lo que sí es seguro es que este martes, Letizia Ortiz ha vestido uno de sus looks más cercanos y naturales. Lo ha hecho a las puertas del Pabellón del Rey en Zarzuela, desde donde se ha despedido de Sofía junto al rey Felipe.
Letizia, a quien se la ve toda una madre orgullosa mientras charla con su hija frente a las cámaras de la prensa, se ha enfundado en unos vaqueros casi pitillos blancos, y justo de ese mismo color es la camiseta básica con escote en pico que luce en la parte superior, la cual va acompañada de una americana gris. Por lo que podríamos decir que es un look de oficina perfecto; pero lo que realmente acerca a Letizia al pueblo es su calzado.
Por todos es sabido que nuestra reina es toda una apasionada de los tacones, pero cada vez, es más frecuente verla con zapatos de estilo sport. Y eso es justo lo que ha hecho hoy, decantarse por unas zapatillas blancas con toques de color. En concreto, se trata de un modelo de la firma española Mu the Brand y cuestan 113,00 euros.
Estas zapatillas son hechas a mano, diseñadas y fabricadas en nuestro país en su totalidad y, además, cuentan con elementos clave para convertirse en las favoritas de cualquier zapatero. Aparte de su confortabilidad, este calzado que hoy luce la reina Letizia es totalmente tendencia. En primer lugar, porque es blanco, y ya sabemos que las zapatillas blancas son punteras en el street style. Pero es que, además, llevan pincelas de colores neutros, que son quienes consiguen marcar la diferencia.
Su lengüeta está teñida de un color anaranjado que combina a la perfección con el azul cielo que tienen en la parte trasera, que se llama cuello. Además, en la puntera encontramos un tono gris que, aunque apenas se diferencia del blanco de la zapatilla, consigue contrastar; así como lo hacen sus cordones beis, que por cierto, cuentan con el herrete en rojo.
