Si hablamos del último año profesional de Shakira, la palabra perfecta para definirlo sería éxito. Sin embargo, sin poner en tela de juicio el talento implícito con el que cuenta la colombiana, es innegable que el despegue de su carrera ha estado directamente relacionado con el relato de su vida personal. Las canciones que ha sacado recientemente van ligadas a su historia de desamor con Gerard Piqué, quien le fue infiel con Clara Chía tras más de una década de relación.
Pero, por primera vez en un año, la artista no ha lanzado un tema dedicado exclusivamente a ex (o a Clara Chía), sino también a los verdaderos amores de su vida: sus hijos, Milan y Sasha, de 10 y 8 años respectivamente. Se trata de una balada romántica titulada ‘Acróstico’ que ha visto la luz esta misma madrugada y que, de alguna forma, también lleva algunas indirectas al padre de sus niños.
“Lo único que quiero es tu felicidad y еstar contigo. Una sonrisa tuya es mi debilidad. Quererte sirve de anestesia al dolor. Hace que me sienta mejor. Para lo que necesites estoy. Viniste a completar lo que soy”, dice la letra de una de las estrofas de ‘Acróstico’ antes de que la colombiana pronuncie con su cálida voz: “Se nos rompió solo un plato, no toda la vajilla. Y aunque no sé poner la otra mejilla, aprender a perdonar es de sabios”
Y sí, estas últimas palabras, así como otras que canta a lo largo del tema tales como “me enseñaste que el amor no es una estafa y que cuando es real no se acaba”, son las que todo el mundo cree que van de una u otra forma dirigidas a Piqué, ya que se puede entender que se refiere a que, aunque se hayan separado por un “sólo plato”, la relación con sus hijos continuará intacta y ella hará todo lo posible para que los tres como familia continúen unidos.
