La Universidad de Harvard, conocida por su excelencia académica, no solo se destaca en la educación superior, sino también ayuda a las personas de todo el mundo a tener una vida mucho más feliz y saludable, gracias sus múltiples estudios e investigaciones.
Los 6 consejos más efectivos para controlar la ira y ser más positivo, según los expertos de Harvard
Precisamente, algunos científicos de la Universidad de Harvard han descubierto las principales herramientas para ayudar a las personas a superar el rencor y cultivar una actitud más positiva en la vida.
Pero primero lo primero... ¿Cómo surge la ira? Según el neurocientífico R. Douglas Fields cuando nos enfrentamos a un estrés crónico o a un trauma, nuestro cerebro reconfigura los circuitos de la ira. "En otras palabras, el nivel sostenido de estrés y miedo que experimentamos cada día cuando estamos bajo presión agota nuestros recursos emocionales, haciéndonos mucho más propensos a enfadarnos, incluso ante provocaciones insignificantes", explica el experto.
Sin embargo, también señala lo siguiente: "La ira no es intrínsecamente mala y reprimirla no es bueno ni para ti ni para la gente que te rodea. Lo importante es saber canalizarla y centrarnos en lo que de verdad importa en cada momento".

1. Reconoce lo que está pasando
A menudo intentamos reprimir nuestros sentimientos para no parecer molestos. Pero si sientes impotencia o algo te está causando dolor, tienes derecho a sentir rabia. No descargues inmediatamente tus emociones hacia la otra persona, pero reconoce lo que sientes. De hecho, los estudios demuestran que, cuando está justificada,
"la ira es una respuesta mucho más sana que el miedo porque provoca sentimientos de certeza y control, y tiene menos probabilidades de provocar los efectos adversos del estrés, como hipertensión o secreción elevada de la hormona del estrés".

2. Pasa la página rápido y olvida
Desahogarse en exceso no es tan productivo como parece. Tomemos por ejemplo, aquellas instalaciones donde puedes pagar para destrozar televisores y demás cosas materiales con un bate de béisbol. Las investigaciones demuestran que este tipo de "terapia de destrucción" hace que tu ira aumente en lugar de disminuir.
Del mismo modo, se ha demostrado que el desahogo crónico, en el que se repiten los mismos problemas sin intentar comprenderlos o resolverlos, hace que tanto tú como las personas que te escuchan os sintáis peor.

3. Aplica la empatía
Los expertos de Harvard promueven la empatía como una herramienta fundamental para superar el rencor. Al tratar de entender los sentimientos y perspectivas de los demás, puedes desarrollar una comprensión más profunda de las situaciones conflictivas y reducir la hostilidad.
4. Enfócate en lo bueno
Al igual que la empatía, la gratitud es un componente esencial para fomentar la positividad. Las personas deberían enfocarse más en todo aquello por lo que están agradecidas en lugar de centrarse en lo que les falta. Practicar la gratitud diariamente puede cambiar la forma en que percibes el mundo y a no explotar tan fácilmente en situaciones complicadas.
5. Aplica la resiliencia
Aprender a enfrentar desafíos y superar obstáculos te ayudará a desarrollar una mentalidad más positiva. La resiliencia te permite adaptarte a las circunstancias adversas y verlas como oportunidades de crecimiento.
6. Canaliza estratégicamente tu enfado
La ira puede aumentar nuestra confianza y hacernos sentir que somos capaces de todo. Los investigadores han descubierto que las personas que se enfadan también creen que prevalecerán ante cualquier circunstancia. A la mayoría de las personas las educan para equiparar la ira con una crisis descontrolada. Pero esta emoción es una señal importante de que algo va mal. En conclusión, si sabemos aprovecharla, puede darnos la fuerza que necesitamos para hacer las cosas bien.