En un jardín secreto en la costa oeste de Mallorca se encuentra esta exclusiva villa. Escondida detrás de un muro de piedra, la Casa Serena es una oda a la simplicidad, ideal para realizar una escapada y tener unas vacaciones de ensueño.
Desde el principio, el estudio de arquitectura Moredesign (encargados del proyecto) tuvo claro mantener la sencillez de la vivienda. "Discreción y humildad son palabras que me vienen a la mente", señala su director, de Diseño Oro del Negro, un germano-estadounidense que creció en la isla.
El piso del porche está hecho de piedra local, que ha sido trabajada a mano e insertada manualmente en un suelo de mortero de cal. Los muebles de madera, sencillos pero cómodos, se consiguieron en Let's Pause y la silla de pavo real es un hallazgo de una tienda vintage.
Esencia mallorquina en la casa
El comedor está situado junto a la cocina. Los suelos de todo el interior son de mortero de cal (de la familia del cemento pulido), y las nuevas vigas del techo, de madera de castaño.
"Nos encanta el castaño porque es más duro que el pino, tiene mucho carácter y se puede tratar con procesos naturales para crear efectos y pátinas muy interesantes", explica Manuel Villanueva, director y arquitecto en Moredesign. Los taburetes en cuero y madera (típicos en la Mallorca de los años 70) son los únicos muebles que quedan de la casa original.
Rescatando el pasado
Las vigas de hormigón preexistentes del antiguo porche se reutilizaron para el techo del nuevo patio cerrado. Se acabaron con un simple lavado de cal. Para delimitar el espacio se utilizaron puertas de metal y cristal de la carpintería de diseño Mairata. La tapicería es de Tomás Riera, de Manacor. Retapizó los sofás del propietario con una suave tela de lino.
El toque rústico de la cocina
La curvilínea campana extractora es un elemento personalizado de Moredesign acabado en yeso de cal. La encimera y el lavabo son de cuarcita gris oscura, procedente de la península y trabajada por el artesano Juan Camposol.
El estudio de diseño multidisciplinar mallorquín Senaia Studio (@senaia_studio) creó la única lámpara colgante, realizada por la ceramista local Dora Good. Los vasos son de la cristalería local Gordiola y las tablas de madera se adquirieron en una tienda de la cercana a Sóller.
Las jarritas de terracota son de Dora Good. La chimenea de nueva construcción de la zona de estar está acabada con dos grandes piezas de piedra cuarcita, donde se apoyan unas velas.
Las vasijas rústicas que decoran tanto el salón como las habitaciones confieren a las estancias un ambiente cálido y sencillo. Los recipientes de cristal, botellas tradicionales mallorquinas para almacenar vino y aceite de oliva, son hallazgos de un mercadillo.
Un dormitorio minimalista
El menos es más es el mandamiento predominante del dormitorio. La cama empotrada en el dormitorio principal y otros elementos, como armarios, mesillas de noche y armarios de baño y bañeras son cruciales para que las habitaciones pequeñas parezcan más espaciosas", apunta Del Negro. "Creo firmemente que el diseño mediterráneo debe fomentar un estilo de vida sin complicaciones", afirma.
El mar como compañía
Cuidadosamente situado para disfrutar al máximo de las espectaculares vistas de la propiedad al mar Mediterráneo se encuentra el Miramar, un mirador que se encuentra a dos niveles por debajo de la casa. La zona que se ve aquí incluye bancos perimetrales empotrados y una mesa de bebidas vintage que fue adquirida por el propietario de la casa.
