Llega la celebración más terrorífica del año y toca escoger disfraz, pero ten cuidado porque hay algunas personas que llevan todo el año con el disfraz de fantasma, haciendo ghosting a diestro y siniestro.

Y es que en España, se ha descubierto, según un estudio hecho por IPSOS DIGITAL y Bumble, que alrededor de un 42% de la población española entre 18 y 50 años ha experimentado alguna vez esta técnica abusiva a nivel emocional. Este porcentaje equivale a que 4 de cada 10 españoles ha sido víctima de ghosting. Además, más de un tercio –alrededor de un 34% - de este estudio “comentaba haber conocido a alguien que ha cancelado su cita a última hora o ha dado excusas para no conocerse en persona”.
Pero no toda la culpa la tienen los demás, ya que los españoles han confesado que, alguna vez en su vida, han desaparecido sin explicación alguna, por diversas cuestiones. Un 36% lo ha hecho por rechazo a la otra persona y saber lidiar con la situación; más de un 40% para evitar herir al que está al otro lado de la pantalla; y un 38% ha sido por la falta de feeling con la otra persona.
Aquí tienes una guía para que este Halloween no te toque lidiar con un fantasma o para pensarte muy bien si quieres convertirte en uno de ellos.
Cómo puedes haber experimentado esta táctica abusiva
Antes de nada, es muy importante saber qué es exactamente el ghosting, y es que, resulta ser una forma, cada vez más común, de abuso emocional, con la acción de alejarse sin decir nada o dejar de hablar con alguien sin un motivo o explicación.

Este fenómeno puede afectar directamente a nuestra salud mental, ya que según otro estudio de la Asociación Internacional del estudio de las Relaciones, cuando se ha sufrido alguna vez ghosting han experimentado una ansiedad significativa y un sentimiento muy elevado de rechazo. Por lo que, en conjunto, se traduce a una ansiedad por apego y una creencia distorsionada sobre la construcción de la idea de pareja romántica.
Dentro de esta acción en la que muchas veces caemos sin darnos cuenta, hay varios tipos de técnicas que nos puede afectar a nuestra salud mental. Está el ghosting directo o minighosting, que es una desaparición sin explicación aparente. Luego está el indirecto o ghosting pasivos, en el que es mucho más disimulado, no deja de hablarte directamente.
Cómo evitar convertirte en un 'ghosteador'
No vamos a ser santos, todos alguna vez hemos hecho ghosting ya sea con una aplicación de citas o con algún que otro/a compañera de trabajo. Y es que 1 de cada 3 españoles reconoce haber hecho esta táctica alguna vez. En muchas ocasiones es el miedo a enfrentarte a la situación de tener la charla en la que la relación, sea de un conocido o un ligue, quieres que termine.
Aún así tienes que armarte de valor y tener esa temida conversación para no dejar a la otra persona con un mal sabor de boca.
La psicóloga y sexóloga, Ana Lombardía, da algunos consejos para lidiar con ese duelo. "Lo primero de todo, hay que escribir al menos un mensaje de vuelta en el que refleje los sentimientos y una pequeña explicación sobre por qué no quieres seguir teniendo citas o seguir conociéndote con la otra persona. Por otro lado, no temas la confrontación, ya que es mejor ser sincero que desaparecer sin ninguna explicación. Y sobre todo, no pongas excusas y sé sincero con la otra persona, ya que tus motivos son totalmente válidos".
Tarjeta roja a los fantasmas

Algunas aplicaciones de citas, como Bumble, han implementado una opción en sus normas de comportamiento dentro de la comunidad para desincentivar a los que dejan plantados en sus citas si se confirmó oficialmente una cita entre ambas partes.