En la familia, en el trabajo, la pareja o entre nuestro grupo de amistades, no es la primera vez que nos encontramos con una persona con la que sentimos que se nos va la energía. Parece que nos consume, nos deja sin fuerzas, incómodas o en medio de un mar de inseguridades. A veces es una persona con la que no nos llevamos particularmente bien, alguien que nos ha hecho daño o con la que hemos pasado un mal trago. Pero en otras ocasiones, son personas a las que nos une un vínculo mayor, como puede ser un familiar cercano o nuestra propia pareja.
Hablamos de personas tóxicas y, para saber identificarlas, hemos recurrido a todo un referente: Silvia Congost, psicóloga experta en dependencia emocional, autoestima y relaciones.

Qué son las personas tóxicas
“Las personas tóxicas son aquellas que cuando nos vinculamos con ellas, acabamos sufriendo y pasándolo mal. En ocasiones es, simplemente porque no encajan en lo importante con nosotros (tienen valores distintos, no coincidimos en lo importante, no tenemos nada en común o diferimos en aspectos esenciales para nuestra relación, por ejemplo, si somos pareja y uno quiere tener hijos y el otro no)” nos explica la experta.

Pero no termina aquí, sino que añade un segundo punto fundamental: “En otras ocasiones, es porque esa persona nos trata mal: destruye nuestra autoestima con comentarios hirientes que nos hacen sentir cada vez más inseguros, más imperfectos, con más miedos, personas que nos dejan de hablar durante días, que nos ningunean, que no nos tienen en cuenta y que hacen que acabes sintiendo síntomas de ansiedad, depresión u obsesión” concluye.

Qué tipo de personas tóxicas hay
Teniendo en cuenta la diferenciación que marca Silvia Congost en cuanto a las personas que nos hacen daño que nos podemos encontrar en la relación de pareja, en una amistad, la familia o en el trabajo, podríamos distinguir dos tipos:
- Personas tóxicas para uno: “porque no encajan con lo básico y eso les llevará a no poder encontrar el punto de encuentro necesario para cimentar la relación (no se tratará de una mala persona)” explica la psicóloga.
- Personas tóxicas para todo el mundo: “porque están dañadas al tener un trastorno de personalidad (los perfiles que maltratan a los demás como el trastorno de personalidad narcisista o el psicópata)” señala.

Cinco claves para identificar a las personas tóxicas
¿Sientes que alguien afecta negativamente a tu bienestar mental y emocional? ¿No sabes si deberías establecer límites o poner fin a esa relación? Silvia Congost incide en cinco puntos clave para saber identificarlas, precisamente el primer paso para poder liberarte de ellas.

- No te aporta paz: esa relación “te crea obsesiones, rumiaciones sobre lo que ocurre entre vosotros, te quita energía, te genera inseguridad y angustia. Inviertes grandes dosis de energía en encontrar la manera de que todo funcione, pero sin éxito” expone la psicóloga.
- Te falta al respeto: “te habla mal, te denigra o te humilla, aunque diga o creas que lo hace por ti”.
- Mina tu autoestima: esa persona que “te hace sentir que no vales, que no haces nada bien, que eres inútil o no eres suficiente”.
- Ataca a quien quieres: ojo si “habla mal de tus seres queridos y consigue que te vayas alejando poco a poco de ellos”.
- Te hacen sentir culpable: “Pueden hacerte creer que eres el culpable de su forma de tratarte y en el fondo no son ni conscientes del daño que hacen ni se responsabilizan de ello” señala Silvia. Además, una muestra total de falta de empatía.

Cómo liberarte de una persona tóxica
¡Aléjate! Silvia Congost lo tiene claro y afirma rotundamente: “Para liberarte de ellas, lo primero es ser capaz de identificarlas, llamarlas por su nombre, atrevernos a decir ‘esta persona es tóxica para mi, no me viene bien’ y a continuación, cortar ese vínculo o, por lo menos, tomar distancia. Cuanta más distancia, más paz sentiremos y menos sufriremos. Se nota en seguida en el cuerpo y en la mente” concluye la experta en dependencia emocional.
Ahora que tienes todas las claves es hora de sopesar y sobre todo de tener en cuenta, como publica Silvia, que “solo seremos libres y recuperaremos nuestro poder si somos capaces de enfrentarnos y aceptar la realidad que tenemos delante”. El momento ha llegado.